Es fundamental enseñar a los niños la importancia de un buen cuidado dental lo antes posible. Ayúdeles a entender por qué es importante cepillarse los dientes y cómo mantenerlos limpios. Al aprender buenos hábitos en una etapa temprana, sentará las bases para el cuidado de los dientes a medida que crezca.
Es importante hacer las cosas divertidas cuando se enseña a los niños pequeños a cuidar de sus dientes. Deje que tomen propias decisiones sobre el cuidado dental, dentro de lo razonable, y que elijan su propia pasta y el cepillo de dientes para que se ilusionen con el objeto. Los niños tienden a responder mejor cuando usted les ofrece opciones y les permite tomar sus propias decisiones sobre el cuidado dental, dentro de lo razonable.
Cómo crear buenos hábitos de limpieza dental
Hagan juntos un cartel con un horario para que esté a la vista. También puede dibujar o fotografiar los pasos de cepillarse los dientes.
Intente usar un temporizador (un reloj de arena o el temporizador del teléfono móvil) para ayudar a su hijo a comprender cuándo debe terminar el cepillado.
Cómo lavar los dientes de un bebé
A los bebés les puede resultar muy desagradable la sensación de tener en la boca un objeto extraño durante el cepillado, además del sabor de la pasta dental o la espuma que se forma con el dentífrico.
Elija un cepillo muy suave o con cerdas de silicona y una pasta dental de sabor a fruta. También hay líquidos hipoalergénicos sin olor ni sabor.
Si el momento del cepillado es un drama, puede cepillar los dientes de su bebé mientras se está bañando porque en ese momento suelen estar relajados y entretenidos con los juguetes que flotan en el agua. También puede seguir los consejos para ayudar a los niños a autistas a lavarse los dientes porque estos niños tiene mucha sensibilidad en la boca, igual que su bebé, y estos consejos pueden resultarle útiles también.
Cómo elegir un cepillo de dientes para bebés
Tanto si hablamos de un cepillo de dientes manual como eléctrico, en el caso de los bebés tendremos en cuenta que la operación del cepillado debe realizarse suavemente.
En general hay que elegir un cepillo de cerdas muy suaves, incluso de silicona, y un cabezal pequeño para que no les incomode tenerlo dentro de la boca.
Cepillo de dientes eléctrico para bebés
Se puede empezar a usar un cepillo de dientes eléctrico a partir de los tres años, el modelo debe ser apropiado para la edad: cuanto menor es la edad, más delicada es la limpieza. A un niño le debe gustar un cepillo de dientes, lo motiva a cepillarse los dientes regularmente y a fondo, y lo ayudará a desarrollar el hábito de cuidar su cavidad bucal.
Al elegir un cepillo de dientes para niños, debe tener en cuenta varios puntos importantes.:
- Las cerdas deben ser suaves, ya que el esmalte infantil es más delgado y fácil de dañar.
- El cabezal de limpieza del cepillo para niños debe ser pequeño, esto reduce el riesgo de lesiones durante el procedimiento y le permite limpiar lugares inaccesibles.
- Es importante que el niño se sienta cómodo sosteniendo el cepillo para que no se salga de sus manos, por lo que es mejor si el mango del cepillo está cubierto de goma.
¿Cómo facilitar el cepillado de dientes a un niño con autismo?
Consejos para niños con autismo que tienen problemas para cepillarse los dientes
Fuente: https://blog.sensorytheraplaybox.com/
En general a los niños no les gusta mucho el cepillo de dientes, pero el el caso de los niños autistas a menudo tienen problemas sensoriales que pueden aumentar aún más su resistencia.
Con hipersensibilidad, los niños perciben cualquier sensación en la boca como muy fuerte. El toque más suave puede ser extremadamente desagradable e incluso doloroso, y esto les causa mucha ansiedad.
A continuación hablaremos de algunas recomendaciones generales que le ayudarán a comprender mejor la situación, sin embargo, es recomendable contactar con un terapeuta capacitado en el campo de la terapia motora oral.
En algunos niños, las cerdas del cepillo de dientes causan molestias extremas. Intente elegir un cepillo con las cerdas más suaves o las cerdas de silicona. Los cepillos de dientes para bebés pueden ser una herramienta «de transición» que ayudará a su hijo a prepararse para un cepillo de dientes regular.
Pruebe con pastas dentales de un sabor agradable. A los niños en general no les gusta mucho el sabor clásico mentolado del dentífrico. Les puede resultar fuerte y picante en la boca. Pruebe las pastas de sabor a fresa o a otra fruta que le guste. Existen en el mercado dentífricos de colores brillantes que pueden ser una motivación en el momento del cepillado.
Quizá debe dejar que el niño elija la pasta que le resulta atractiva por el color y el sabor.Tenga en cuenta que su hipersensibilidad hace que cualquier sabor le resulte desagradable.
Si el problema radica en la sensación de cómo la pasta hace espuma en la boca, pruebe con productos hipoalergénicos sin sabor ni olor.
El mango del cepillo debe ser pequeño para que el niño pueda agarrarlo bien, y las cerdas deben ser muy suaves para no dañar las encías.
Cuide la temperatura del agua en el momento de enjuagar la boca porque la sensación de frío puede resultarle muy desagradable. Es mejor si es agua tibia, pero no caliente.
Hay cepillos con música incorporada, melodías infantiles o sonidos de animales, que harán más agradable la operación del cepillado.
Pero también puede poner su música favorita mientras se lava los dientes para que lo asocie algo agradable, o simplemente puede tararear la canción favorita de tu hijo mientras dure el cepillado. Tan pronto como deje de cepillarse los dientes, deje de cantar o apague la música. Tan pronto como el niño reanude el cepillado, encienda la música nuevamente.
Pruebe a cepillarse los dientes con su hijo mostrando gran entusiasmo para que su hijo vea que se trata de una actividad divertida.
Cepille los dientes de su hijo frente al espejo para que sienta mayor control sobre la situación. Puede estar más tranquilo si puede ver el cepillo de dientes y lo que está pasando exactamente.
Es conveniente usar un temporizador que le señal el tiempo total del cepillado. Para comenzar, configure el temporizador por solo unos segundos, para que el niño se acostumbre y entienda que es sólo un momento y no es tan aterrador. Luego, aumente gradualmente el intervalo de tiempo hasta alcanzar los 2 minutos recomendados.
Para las revisiones con el dentista, es muy importante que sea un profesional especializado en este tipo de niños, con buena reputación y que sepa cómo debe de tratar a tu hijo. Avisa al dentista, prepara la cita y asegúrate de que el personal de la clínica que va a recibirte sabe cómo debe tratarle. Asegúrate antes de llegar que no hay retrasos para que no se ponga nervioso en la sala de espera.
Cepillo de dientes elécítrico para niños autistas
El cepillo eléctrico puede ser adecuado para algunos niños ya que disfrutan de la sensación de vibración. Además los cepillos eléctricos suelen incorporar la función de temporizador que informa con una luz o un cambio en la vibración de que el tiempo de cepillado ha terminado.
Antes de usar un cepillo de dientes eléctrico, consulte con su dentista o higienista dental.
Cuándo empezar con el cuidado de los dientes en bebés
Todos los niños deben tener su primera visita al dentista a los seis meses después de que les haya salido el primer diente o al año de edad, lo que ocurra primero.
Elija a un buen dentista que esté especializado en niños pequeños y que tenga buenas referencias. Es muy importante que desde el principio no identifiquen la visita al dentista con el miedo o el dolor.
Cuando se trata de cuidar al bebé, la mayoría de los padres son conscientes de la necesidad de realizar visitas regulares al pediatra para revisar el estado de salud del bebé, sin embargo es menos conocido es la importancia del cuidado dental temprano y regular. Para garantizar una salud bucal óptima, la Academia Estadounidense de Odontología Pediátrica (AAPD) recomienda comenzar una visita dental con el primer diente del bebé. Esta es la forma más efectiva de comenzar un programa de cuidado dental preventivo de por vida.
Un diente de leche + una visita dental pediátrica = cero caries
Revisar el primer diente permitirá al odontopediatra verificar el desarrollo de la cavidad oral y ver si los dientes están creciendo correctamente. Con las visitas regulares desde el principio se puede detectar la caries dental temprana, dice H. Pitts Hinson, presidente de AAPD. «También le da al dentista la oportunidad de guiar a los padres a través de un programa completo de cuidado dental en el hogar para el niño».
La caries dental, incluso en las primeras etapas de la vida, puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar a largo plazo del niño, un problema cada vez más grave. La caries dental es la enfermedad infantil más común y va en aumento en los últimos años.
Posiblemente se deba al hecho de que sólo tres de cada cinco niños visitan al dentista al menos una vez al año. Los estudios demuestran que en los niños que visitan al dentista por primera vez antes de cumplir 1 año de edad, el costo del cuidado dental en los primeros cinco años es un 40 por ciento más bajo que los niños que no lo hacen. La revisión dental periódica hace que la atención preventiva sea eficaz y evite tratamientos costosos en el futuro.
Sin atención preventiva, el impacto de la caries dental en el desarrollo de un niño puede ser sorprendente. Un estudio de odontología pediátrica mostró que los niños con caries son mucho más propensos a pesar menos del 80 por ciento de su peso corporal ideal. Pero es mucho más preocupante comprobar que los efectos de la mala salud bucal permanecen durante toda la vida.
También influye en el bebé la salud dental de las mujeres embarazadas. Las nuevas investigaciones sugieren que una higiene oral inadecuada puede aumentar el riesgo de tener un hijo con bajo peso al nacer, desarrollar enfermedades cardíacas o sufrir un derrame cerebral en la edad adulta.
Nadie está mejor preparado para cuidar los dientes de leche que los odontopediatras. La especialidad en odontopediatría hace posible que desde la primera vivita pueden detectar y poner solución a los problemas incipientes en la salud dental del bebé y hacer el seguimiento en niños y adolescentes.